MORUCHA
MORUCHA
1. Introducción
Raza maternal portadora de un enorme caudal genético, constituida por animales armónicos de gran viveza, vistosidad y rusticidad, con dos variedades en la capa: cárdena y negra. De aptitud cárnica, se explota en régimen extensivo formando parte del paisaje por su perfecta integración en el medio, cincelada a través de los años, de donde es capaz de proporcionar una carne roja y natural a partir del aprovechamiento de los recursos naturales; perfectamente adaptada a los grandes espacios pastables: Dehesas y serranías, valorizando recursos infrautilizados como la rastrojera, ramón, matorrales y pastos secos. Catalogada como raza de fomento, se localiza fundamentalmente en la provincia de Salamanca, sudoeste de Zamora y parte noroeste de Cáceres.
Debe su nombre a cierto grado de imperfección del color negro de su capa, aunque también se denomina salmantina por ser Salamanca la provincia que guarda la mayor parte de sus efectivos y esencias de su ancestral pureza.
2. Origen e historia
Tiene su ascendencia en el Tronco Negro Ibérico; seleccionada por la propia naturaleza a lo largo de los siglos, se mantuvo unida en todo tiempo si bien las directrices de cría y las condiciones ambientales introdujeron una serie de modificaciones que la definen y diferencia de otras razas. Su formación se llevó a cabo a través de un largo proceso de ambientación que desembocó en un producto autóctono, asentado en la meseta y más concretamente en las zonas adehesadas de la provincia de Salamanca.
En tiempos remotos era apreciada por su triple aptitud de trabajo-lidia-carne y así se mantuvo hasta que las exigencias del mercado impusieron la especialización, aunque una parte del efectivo se encaminó hacia la lidia recurriendo al cruzamiento absorbente con sementales de la misma.
A los fines mejorantes contribuyó de un modo singular la vacada selecta de la finca Castro Enriquez en la localidad de Aldehuela de Bóveda (Salamanca), establecida en concierto entre la Dirección General de la Producción Agraria y la Diputación Provincial de Salamanca desde el año 1969; en 1991 se reconoció como Estación de Valoración Individual para la raza.
El Libro Genealógico de la raza se creó en 1974; en 1979 se catalogó por el Ministerio de Agricultura como raza autóctona de fomento en base a la magnitud de su censo, área de ocupación y características productivas, por resultar interesante para contribuir al desenvolvimiento de la producción animal, clasificación que continúa en el actual Catálogo.
En 1993 se reconoció su Esquema de Mejora Genética, y al año siguiente se publicó el Reglamento de la Denominación Específica “Carne de Morucha de Salamanca”.
3. Distribución geográfica
Su asentamiento tuvo lugar en el oeste peninsular, en la denominada dehesa fría, constituida por extensas áreas de encinas, robledales y quejigales en distintos estadios, aunque ocupando también serranías e integrándose perfectamente en el medio. El último censo elaborado por el MAPA en el año 1986, le otorgaba unas 162.000 cabezas, ocupando un lugar destacado dentro de las razas autóctonas.
Su distribución por orden de abundancia y provincias era la siguiente: Salamanca (120.000), Cáceres (22.000), Zamora (4.000), Valladolid (1.500), Avila (800), Badajoz (700), así como pequeños censos en Jaén, Madrid y zonas colindantes de Portugal.
Hoy su censo se encuentra en regresión, en torno a 120.000 cabezas de las cuales unas 18.000 se encuentran inscritas en el Libro Genealógico agrupando éste en torno a las 200 ganaderías. Destaca entre todas la provincias la de Salamanca por poseer el mayor censo y pureza racial del conjunto.
4. Descripción de la raza
Responde a un tipo de animal eumétrico, mesomorfo y de perfil recto, aunque hay ejemplares subcóncavos, de conjunto armónico y proporcionado, marcado dimorfismo sexual y temperamento vivo.
Gran rusticidad, instinto maternal acusado, gran longevidad y buena facilidad para el parto.
Cabeza: De proporciones medias, cara descarnada y ligeramente convexa. Orejas gruesas, horizontales con pelos abundantes en el interior y borde superior. Los cuernos se dirigen al principio lateralmente para doblar hacia delante y arriba en forma de gancho, de color blanco sucio en la cepa, pala y negros en la punta.
Cuello: Corto, musculado, con papada recogida y perfil ligeramente discontinuo.
Tronco: Macizo y armónico. Cruz ancha, poco destacada, pecho ancho, musculoso con dorso recto, ancho, desarrollado y bien musculado. Tórax profundo y vientre bien proporcionado, con grupa ampulosa, recta y musculada. La cola es fina y termina en borlón abundante.
Extremidades: Espalda amplia y musculada, Muslos gruesos, proporcionados y convexos, con nalgas redondas y descendidas. Piernas fuertes, de esqueleto fino.
Capa: Se admiten dos coloraciones, negra uniforme y cárdena, con las variantes de propio, claro, oscuro y entrepelado (negro cárdeno), con intensificación centrífuga de la pigmentación, tolerándose manchas blancas en algunas partes. Mucosas visiblemente oscuras, morro negro sin banda leonada.
Formato: Bovino de proporciones medias, alcanzando los machos 900 kg y las hembras 500 kg.
5. Situación actual y perspectivas
La Asociación Nacional de Criadores se fundó en el año 1971, con el objetivo de mejorar y promocionar la raza, siendo cinco años más tarde reconocida como Entidad Colaboradora del Ministerio de Agricultura. Desde 1976 el Libro Genealógico es responsabilidad de la Asociación de Criadores, quien recibe ayudas del propio Ministerio y de la Consejería de Agricultura y Ganadería (Junta de Castilla y León).
La Diputación Provincial de Salamanca mantiene un buen rebaño en la finca Castro Enríquez. Desde 1993, se viene trabajando sobre el reconocido Esquema de Mejora Genética de la Raza Morucha, con objeto de lograr una mejora del rendimiento económico de la misma, tratando de conservar su rusticidad referida al medio y al sistema de explotación. Las ganaderías pertenecientes a la Asociación pueden adherirse al Esquema, que pasa por las distintas fases de selección de toros que van a ser probados en función de su ascendiente y características productivas, valoración individual en estación en el Centro Homologado de Testaje de Castro Enríquez, valoración de la ascendencia, valoración de reproductores, y valoración de la descendencia.
6. Productos de interés generados por la raza
Los terneros nacen en el campo y siguen una lactancia natural durante un período no inferior a 7-9 meses, siendo a partir del destete cuando se someten a un proceso de engorde con piensos naturales a base de cereales para dar como resultado la obtención de una carne natural con unas características diferenciales representadas por una mayor finura de fibras musculares y grasa bien distribuída, con escasa formación de cúmulos grasos, consecuencia de su sistema de explotación; es jugosa, aromática y de un color que varía entre el rosa brillante y el rojo cereza.
En la actualidad, los tipos comerciales que presiden son terneros cruzados entorno a 200 kg de peso vivo para cebadero, criados según sistema tradicional, así como terneros puros o cruzados cebados en la propia explotación con edades de 12-14 meses obteniéndose una canal de 260-280 kg. Sin embargo, las hembras cruzadas son cebadas en la propia explotación con edades de 10-12 113 meses, obteniendo así una canal de 180-200 kg.
En 1994, se aprobó el Reglamento de la Denominación Específica ”Carne de Morucha de Salamanca” (posterior IGP), bajo la cual se venden tres tipos comerciales: ternera, añojo y novillo. Desde 1998, tanto la Asociación de Criadores como el Consejo Regulador, se hallan integrados en la organización V.E.C (Vacuno Extensivo de Calidad) y desde el año siguiente en INVAC (Interprofesional de la Carne de Vacuno Autóctono de Calidad).
Una formula comercial adicional para la raza es la que le confiere su utilización para el manejo del ganado de Lidia, preparando cabestros procedentes de machos cárdenos castrados a la edad de erales, que generalmente proceden de ejemplares de mal tamaño y hueso.
1. Introducción
Raza maternal portadora de un enorme caudal genético, constituida por animales armónicos de gran viveza, vistosidad y rusticidad, con dos variedades en la capa: cárdena y negra. De aptitud cárnica, se explota en régimen extensivo formando parte del paisaje por su perfecta integración en el medio, cincelada a través de los años, de donde es capaz de proporcionar una carne roja y natural a partir del aprovechamiento de los recursos naturales; perfectamente adaptada a los grandes espacios pastables: Dehesas y serranías, valorizando recursos infrautilizados como la rastrojera, ramón, matorrales y pastos secos. Catalogada como raza de fomento, se localiza fundamentalmente en la provincia de Salamanca, sudoeste de Zamora y parte noroeste de Cáceres.
Debe su nombre a cierto grado de imperfección del color negro de su capa, aunque también se denomina salmantina por ser Salamanca la provincia que guarda la mayor parte de sus efectivos y esencias de su ancestral pureza.
2. Origen e historia
Tiene su ascendencia en el Tronco Negro Ibérico; seleccionada por la propia naturaleza a lo largo de los siglos, se mantuvo unida en todo tiempo si bien las directrices de cría y las condiciones ambientales introdujeron una serie de modificaciones que la definen y diferencia de otras razas. Su formación se llevó a cabo a través de un largo proceso de ambientación que desembocó en un producto autóctono, asentado en la meseta y más concretamente en las zonas adehesadas de la provincia de Salamanca.
En tiempos remotos era apreciada por su triple aptitud de trabajo-lidia-carne y así se mantuvo hasta que las exigencias del mercado impusieron la especialización, aunque una parte del efectivo se encaminó hacia la lidia recurriendo al cruzamiento absorbente con sementales de la misma.
A los fines mejorantes contribuyó de un modo singular la vacada selecta de la finca Castro Enriquez en la localidad de Aldehuela de Bóveda (Salamanca), establecida en concierto entre la Dirección General de la Producción Agraria y la Diputación Provincial de Salamanca desde el año 1969; en 1991 se reconoció como Estación de Valoración Individual para la raza.
El Libro Genealógico de la raza se creó en 1974; en 1979 se catalogó por el Ministerio de Agricultura como raza autóctona de fomento en base a la magnitud de su censo, área de ocupación y características productivas, por resultar interesante para contribuir al desenvolvimiento de la producción animal, clasificación que continúa en el actual Catálogo.
En 1993 se reconoció su Esquema de Mejora Genética, y al año siguiente se publicó el Reglamento de la Denominación Específica “Carne de Morucha de Salamanca”.
3. Distribución geográfica
Su asentamiento tuvo lugar en el oeste peninsular, en la denominada dehesa fría, constituida por extensas áreas de encinas, robledales y quejigales en distintos estadios, aunque ocupando también serranías e integrándose perfectamente en el medio. El último censo elaborado por el MAPA en el año 1986, le otorgaba unas 162.000 cabezas, ocupando un lugar destacado dentro de las razas autóctonas.
Su distribución por orden de abundancia y provincias era la siguiente: Salamanca (120.000), Cáceres (22.000), Zamora (4.000), Valladolid (1.500), Avila (800), Badajoz (700), así como pequeños censos en Jaén, Madrid y zonas colindantes de Portugal.
Hoy su censo se encuentra en regresión, en torno a 120.000 cabezas de las cuales unas 18.000 se encuentran inscritas en el Libro Genealógico agrupando éste en torno a las 200 ganaderías. Destaca entre todas la provincias la de Salamanca por poseer el mayor censo y pureza racial del conjunto.
4. Descripción de la raza
Responde a un tipo de animal eumétrico, mesomorfo y de perfil recto, aunque hay ejemplares subcóncavos, de conjunto armónico y proporcionado, marcado dimorfismo sexual y temperamento vivo.
Gran rusticidad, instinto maternal acusado, gran longevidad y buena facilidad para el parto.
Cabeza: De proporciones medias, cara descarnada y ligeramente convexa. Orejas gruesas, horizontales con pelos abundantes en el interior y borde superior. Los cuernos se dirigen al principio lateralmente para doblar hacia delante y arriba en forma de gancho, de color blanco sucio en la cepa, pala y negros en la punta.
Cuello: Corto, musculado, con papada recogida y perfil ligeramente discontinuo.
Tronco: Macizo y armónico. Cruz ancha, poco destacada, pecho ancho, musculoso con dorso recto, ancho, desarrollado y bien musculado. Tórax profundo y vientre bien proporcionado, con grupa ampulosa, recta y musculada. La cola es fina y termina en borlón abundante.
Extremidades: Espalda amplia y musculada, Muslos gruesos, proporcionados y convexos, con nalgas redondas y descendidas. Piernas fuertes, de esqueleto fino.
Capa: Se admiten dos coloraciones, negra uniforme y cárdena, con las variantes de propio, claro, oscuro y entrepelado (negro cárdeno), con intensificación centrífuga de la pigmentación, tolerándose manchas blancas en algunas partes. Mucosas visiblemente oscuras, morro negro sin banda leonada.
Formato: Bovino de proporciones medias, alcanzando los machos 900 kg y las hembras 500 kg.
5. Situación actual y perspectivas
La Asociación Nacional de Criadores se fundó en el año 1971, con el objetivo de mejorar y promocionar la raza, siendo cinco años más tarde reconocida como Entidad Colaboradora del Ministerio de Agricultura. Desde 1976 el Libro Genealógico es responsabilidad de la Asociación de Criadores, quien recibe ayudas del propio Ministerio y de la Consejería de Agricultura y Ganadería (Junta de Castilla y León).
La Diputación Provincial de Salamanca mantiene un buen rebaño en la finca Castro Enríquez. Desde 1993, se viene trabajando sobre el reconocido Esquema de Mejora Genética de la Raza Morucha, con objeto de lograr una mejora del rendimiento económico de la misma, tratando de conservar su rusticidad referida al medio y al sistema de explotación. Las ganaderías pertenecientes a la Asociación pueden adherirse al Esquema, que pasa por las distintas fases de selección de toros que van a ser probados en función de su ascendiente y características productivas, valoración individual en estación en el Centro Homologado de Testaje de Castro Enríquez, valoración de la ascendencia, valoración de reproductores, y valoración de la descendencia.
6. Productos de interés generados por la raza
Los terneros nacen en el campo y siguen una lactancia natural durante un período no inferior a 7-9 meses, siendo a partir del destete cuando se someten a un proceso de engorde con piensos naturales a base de cereales para dar como resultado la obtención de una carne natural con unas características diferenciales representadas por una mayor finura de fibras musculares y grasa bien distribuída, con escasa formación de cúmulos grasos, consecuencia de su sistema de explotación; es jugosa, aromática y de un color que varía entre el rosa brillante y el rojo cereza.
En la actualidad, los tipos comerciales que presiden son terneros cruzados entorno a 200 kg de peso vivo para cebadero, criados según sistema tradicional, así como terneros puros o cruzados cebados en la propia explotación con edades de 12-14 meses obteniéndose una canal de 260-280 kg. Sin embargo, las hembras cruzadas son cebadas en la propia explotación con edades de 10-12 113 meses, obteniendo así una canal de 180-200 kg.
En 1994, se aprobó el Reglamento de la Denominación Específica ”Carne de Morucha de Salamanca” (posterior IGP), bajo la cual se venden tres tipos comerciales: ternera, añojo y novillo. Desde 1998, tanto la Asociación de Criadores como el Consejo Regulador, se hallan integrados en la organización V.E.C (Vacuno Extensivo de Calidad) y desde el año siguiente en INVAC (Interprofesional de la Carne de Vacuno Autóctono de Calidad).
Una formula comercial adicional para la raza es la que le confiere su utilización para el manejo del ganado de Lidia, preparando cabestros procedentes de machos cárdenos castrados a la edad de erales, que generalmente proceden de ejemplares de mal tamaño y hueso.