BLANCA CACEREÑA
BLANCA
CACEREÑA
1. Introducción
La raza Blanca Cacereña, se caracteriza por su morfología primitiva, poco evolucionada, rústica y muy fuerte, y bien adaptada al régimen de explotación extensiva del ecosistema de la dehesa en que se desenvuelve.
Enclavada durante siglos en Extremadura y explotada en el pasado por su aptitud trabajo-carne (Laguna, 1991), se ha conservado como una población singular dado su carácter de raza de protección especial como ya se declaro en el Primer Catalogo Oficial de Razas de España (1979). En los años 70 comienzan las primeras medidas para evitar su desaparición, pero es en el año 1997, cuando se pone en marcha la elaboración de un Programa Integral de Conservación, para lo cual son parte fundamental, la Junta de Extremadura desde su Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, como la Facultad de Veterinaria de Cáceres, desde su Departamento de Genética y la Asociación Nacional de Ganaderos Criadores de Raza Blanca Cacereña.
Se expone la raza en todos los certámenes ganaderos de la Comunidad Autónoma, a nivel Nacional participa en todos aquellos en los que se muestran razas en promoción y a nivel Internacional participa en los encuentros y ferias del país vecino Portugal.
2. Origen e historia
Aunque autores como Sánchez Belda, 1981, la consideran la raza bovina más antigua de España, existen dos teorías, respecto a su llegada a la península Ibérica. Por un lado, se considera su posible origen africano, basándose en las pinturas rupestres de Tassi Li (Egipto) y otra teoría supone que los romanos pudieron traer la raza a España procedentes de la actual Italia, basándose en la existencia de documentos que citan los sacrificios de terneros blancos durante las fiestas en honor al dios Júpiter (FeriaeCatinae) (Bergua, 1977).
Si bien ambas teorías coinciden en que las razas bovinas actuales derivan del Bos. T. Primigenius llamado URO aparecido durante los períodos interglaciares. Con la llegada del cristianismo y más tarde la mecanización del campo y la introducción de razas foráneas, más evolucionadas en cuanto a producción cárnica y por ello más rentables, provocó que este efectivo bovino se fue reduciendo drásticamente, hasta llegar a los escasos niveles en los que se encuentra actualmente la raza, por ello declarada en peligro de extinción.
Declarada Raza de Protección Especial en el primer catálogo de razas de España en 1979, situación en la que sigue en él la actualización del Real Decreto 1682/1997 y aparece en la lista de la Unión Europea de razas en peligro de Extinción (R.D.207/96 de 9 de febrero). En 1998 (Decreto 34/1998)se aprueban los criterios para la reglamentación específica del Libro de Registro Genealógico del ganado bovino de la raza Blanca Cacereña y el control de rendimiento y valoración de reproductores inscritos en el libro.
3. Distribución Geográfica
En la actualidad la raza Blanca Cacereña, se distribuye en toda la región de Extremadura en rebaños muy localizados en las provincias de Cáceres y Badajoz, existiendo un pequeño núcleo en el norte de la provincia de Huelva que constituye la única dispersión fuera de la Comunidad Autónoma de Extremadura. Son un total de 19 ganaderías, cuyos efectivos se inscriben el Libro Genealógico de la raza y constituyendo un censo total de 782 animales. La estructura poblacional se muestra en la tabla adjunta.
4. Descripción de la Raza
Morfológicamente, es de proporciones medias, con perfil recto, cuernos largos y en forma de gancho alto en las hembras que en los machos, es más fuerte en su base y dirigida hacia delante. La capa es blanca o amarillenta con fluctuaciones en su intensidad, más clara en los jóvenes y siendo las mucosas preferentemente rosadas aunque se encuentran algunos ejemplares con las mucosas ligeramente pizarrosas. El Decreto 34/1998 de Marzo, específica el prototipo o estándar racial atendiendo a los siguientes parámetros: Coloración de la capa, coloración de las mucosas, cuernos, conformación general, órganos sexuales, cabeza, cuello, Tronco, Cruz, Dorso, Lomo, Grupa, Cola, Espalda, Pecho, Tórax, Vientre, Muslos; Nalgas, Pezuñas, Aplomos y Medidas Zoométricas.
5. Situación actual y perspectivas
La raza Blanca Cacereña, goza de un Programa de Conservación para la gestión genética de la raza basado y planteado en dos niveles. Uno que incluye los programas de gestión del núcleo base de conservación (12 machos y 48 hembras) basado en un sistema de reproducción rotacional y dos el que incluye la preservación del material biológico, mediante la gestión genética de los bancos de semen, óvulos, embriones y ADN. Con el fin de mantener la pureza racial, perfeccionar su conformación y mejorar sus rendimientos cárnicos, se realizan pruebas de control y rendimiento individual de los animales machos. Al ser una raza que se encuentra en peligro de extinción, la valoración de los animales incluye como objetivo no sólo la mejora y la selección de cara a unos rendimientos económicos rentables, sino la conservación de la raza. En aquellos animales procedentes de las series de valoración que no sean seleccionados como futuros reproductores, se estudian sus características carniceras, basándonos en los siguientes puntos: Rendimiento canal (caliente / frío); Rendimiento piezas nobles (estudio despiece); Caracteres organolépticos de la carne (color, aspecto, etc.); Terneza y palatabilidad y Estudios comparativo con otras razas de aptitud cárnica y cruces.
6. Productos de interés, generados por la raza
La mayor importancia que tiene hoy la raza Blanca Cacereña, es la reserva genética que constituye, ya que representa una de las razas más antiguas de ganado vacuno en la Península Ibérica. Respecto a su rendimiento cárnico, decir que es ligeramente (en el entorno del 2%) inferior a otras razas autóctonas más seleccionadas para su producción cárnica, probablemente debido a su piel que representa casi un 9% con relación al peso vivo en un añojo, no obstante esta piel que baja algo su rendimiento es también la que le hace ser más resistente a condiciones difíciles como clima, parásitos, etc. (Bartolomé, P. y García, L.J, 1999).
1. Introducción
La raza Blanca Cacereña, se caracteriza por su morfología primitiva, poco evolucionada, rústica y muy fuerte, y bien adaptada al régimen de explotación extensiva del ecosistema de la dehesa en que se desenvuelve.
Enclavada durante siglos en Extremadura y explotada en el pasado por su aptitud trabajo-carne (Laguna, 1991), se ha conservado como una población singular dado su carácter de raza de protección especial como ya se declaro en el Primer Catalogo Oficial de Razas de España (1979). En los años 70 comienzan las primeras medidas para evitar su desaparición, pero es en el año 1997, cuando se pone en marcha la elaboración de un Programa Integral de Conservación, para lo cual son parte fundamental, la Junta de Extremadura desde su Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, como la Facultad de Veterinaria de Cáceres, desde su Departamento de Genética y la Asociación Nacional de Ganaderos Criadores de Raza Blanca Cacereña.
Se expone la raza en todos los certámenes ganaderos de la Comunidad Autónoma, a nivel Nacional participa en todos aquellos en los que se muestran razas en promoción y a nivel Internacional participa en los encuentros y ferias del país vecino Portugal.
2. Origen e historia
Aunque autores como Sánchez Belda, 1981, la consideran la raza bovina más antigua de España, existen dos teorías, respecto a su llegada a la península Ibérica. Por un lado, se considera su posible origen africano, basándose en las pinturas rupestres de Tassi Li (Egipto) y otra teoría supone que los romanos pudieron traer la raza a España procedentes de la actual Italia, basándose en la existencia de documentos que citan los sacrificios de terneros blancos durante las fiestas en honor al dios Júpiter (FeriaeCatinae) (Bergua, 1977).
Si bien ambas teorías coinciden en que las razas bovinas actuales derivan del Bos. T. Primigenius llamado URO aparecido durante los períodos interglaciares. Con la llegada del cristianismo y más tarde la mecanización del campo y la introducción de razas foráneas, más evolucionadas en cuanto a producción cárnica y por ello más rentables, provocó que este efectivo bovino se fue reduciendo drásticamente, hasta llegar a los escasos niveles en los que se encuentra actualmente la raza, por ello declarada en peligro de extinción.
Declarada Raza de Protección Especial en el primer catálogo de razas de España en 1979, situación en la que sigue en él la actualización del Real Decreto 1682/1997 y aparece en la lista de la Unión Europea de razas en peligro de Extinción (R.D.207/96 de 9 de febrero). En 1998 (Decreto 34/1998)se aprueban los criterios para la reglamentación específica del Libro de Registro Genealógico del ganado bovino de la raza Blanca Cacereña y el control de rendimiento y valoración de reproductores inscritos en el libro.
3. Distribución Geográfica
En la actualidad la raza Blanca Cacereña, se distribuye en toda la región de Extremadura en rebaños muy localizados en las provincias de Cáceres y Badajoz, existiendo un pequeño núcleo en el norte de la provincia de Huelva que constituye la única dispersión fuera de la Comunidad Autónoma de Extremadura. Son un total de 19 ganaderías, cuyos efectivos se inscriben el Libro Genealógico de la raza y constituyendo un censo total de 782 animales. La estructura poblacional se muestra en la tabla adjunta.
4. Descripción de la Raza
Morfológicamente, es de proporciones medias, con perfil recto, cuernos largos y en forma de gancho alto en las hembras que en los machos, es más fuerte en su base y dirigida hacia delante. La capa es blanca o amarillenta con fluctuaciones en su intensidad, más clara en los jóvenes y siendo las mucosas preferentemente rosadas aunque se encuentran algunos ejemplares con las mucosas ligeramente pizarrosas. El Decreto 34/1998 de Marzo, específica el prototipo o estándar racial atendiendo a los siguientes parámetros: Coloración de la capa, coloración de las mucosas, cuernos, conformación general, órganos sexuales, cabeza, cuello, Tronco, Cruz, Dorso, Lomo, Grupa, Cola, Espalda, Pecho, Tórax, Vientre, Muslos; Nalgas, Pezuñas, Aplomos y Medidas Zoométricas.
5. Situación actual y perspectivas
La raza Blanca Cacereña, goza de un Programa de Conservación para la gestión genética de la raza basado y planteado en dos niveles. Uno que incluye los programas de gestión del núcleo base de conservación (12 machos y 48 hembras) basado en un sistema de reproducción rotacional y dos el que incluye la preservación del material biológico, mediante la gestión genética de los bancos de semen, óvulos, embriones y ADN. Con el fin de mantener la pureza racial, perfeccionar su conformación y mejorar sus rendimientos cárnicos, se realizan pruebas de control y rendimiento individual de los animales machos. Al ser una raza que se encuentra en peligro de extinción, la valoración de los animales incluye como objetivo no sólo la mejora y la selección de cara a unos rendimientos económicos rentables, sino la conservación de la raza. En aquellos animales procedentes de las series de valoración que no sean seleccionados como futuros reproductores, se estudian sus características carniceras, basándonos en los siguientes puntos: Rendimiento canal (caliente / frío); Rendimiento piezas nobles (estudio despiece); Caracteres organolépticos de la carne (color, aspecto, etc.); Terneza y palatabilidad y Estudios comparativo con otras razas de aptitud cárnica y cruces.
6. Productos de interés, generados por la raza
La mayor importancia que tiene hoy la raza Blanca Cacereña, es la reserva genética que constituye, ya que representa una de las razas más antiguas de ganado vacuno en la Península Ibérica. Respecto a su rendimiento cárnico, decir que es ligeramente (en el entorno del 2%) inferior a otras razas autóctonas más seleccionadas para su producción cárnica, probablemente debido a su piel que representa casi un 9% con relación al peso vivo en un añojo, no obstante esta piel que baja algo su rendimiento es también la que le hace ser más resistente a condiciones difíciles como clima, parásitos, etc. (Bartolomé, P. y García, L.J, 1999).